La esposa de Calderón dice que el líder nacional albiazul ha utilizado al blanquiazul para esconder su indefinición y defender sus asuntos personales
Por: Redacción Vallarta Independiente. Margarita Zavala cuestionó la elección de Ernesto Cordero como presidente del Senado y señaló que esto es producto de la falta de liderazgo del dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya, quien es factor de división y pidió que renuncie a su cargo.
Respaldo nacional
Ayer mismo, el dirigente nacional panista fue respaldado por los 31 presidentes de los comités directivos estatales del blanquiazul, quienes en una carta expresaron que ha venido desarrollando un gran trabajo y pidieron evitar que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el gobierno impongan un fiscal a modo que les permita llevar a cabo su plan de impunidad transexenal.
Advirtieron que el PRI no ha dudado en recurrir a la mentira, la calumnia, los golpes bajos y los intentos por dividir a los panistas. “Hacemos un llamado a todos los miembros del PAN a tener clara la causa: luchar por construir un mejor México. Respaldaron la decisión de la Comisión Permanente del Consejo Nacional de evitar el pase automático del actual procurador general de la República (Raúl Cervantes) a fiscal general”.
Utiliza al partido
En un video difundido en redes sociales, Zavala aseveró que Anaya ha utilizado al blanquiazul para esconder su indefinición y defender sus asuntos personales. La esposa del expresidente Felipe Calderón sostuvo que la maniobra que llevó a la designación de Cordero, revela la falta de liderazgo en Acción Nacional, no tenemos método ni candidato de cara a 2018 y tampoco tenemos presidente del partido.
Por su parte, Ernesto Cordero, secretario de Estado en el sexenio de Calderón, en una grabación enviada a panistas, expuso que hay una política de exterminio en el blanquiazul “que puede terminar con nuestros derechos partidistas o la militancia en el PAN, van a acabar con un partido de libertades, no somos traidores, somos panistas honestos, y exterminan la posibilidad de tener una opinión diferente a la de la dirigencia”. (Con información de La Jornada)