Mientras se solicita el dinero, Puerto Vallarta tendrá, en su avenida principal, zonas “minadas” que no dan buena imagen al destino.
Desde el puente del Río Pitillal, hasta el puente del arroyo Camarones, son 2.8 kilómetros de distancia, mismos que urge se rehabiliten para que el municipio tenga vialidades dignas de un destino de primer nivel.
En el mes de junio, el alcalde, Arturo Dávalos Peña, se reunió con el fideicomiso de turismo y con la asociación de hoteles y moteles para pactar algunos acuerdos, entre ellos, la reconstrucción de las laterales de la avenida más transitada de Puerto Vallarta.
En total, para los 5.6 kilómetros del tramo señalado, se necesitarían alrededor de 90 millones de pesos. La obra tendría que construirse en concreto hidráulico.
Las laterales tienen un ancho de 8 metros aproximadamente, es decir, serían 44 mil 800 metros cuadrados de concreto los que tendrían que verterse sobra la Medina Ascencio.
En este momento, las laterales están construidas de adoquín. Este mismo está “sentado” sobre 2 centímetros de arena, antes de llegar a la base de tierra. Según lo explicó el ing. Óscar Castellón, cuando los bloques no están perfectamente unidos, se provoca una vibración que hace que la arena salga entre los pegues y los ladrillos se vayan hundiendo para formar el relieve.
La reparación de estos hoyos consiste en sacar los bloques uno por uno, colocar la arena nuevamente y volver a colocar el adoquín, sin embargo, los fragmentos de tierra endebles impiden que la solución sea permanente.
Por este motivo, se pretende construir las laterales en concreto hidráulico, sin embargo, el recurso debe buscarse.
Las pláticas con el secretario de turismo, Enrique Ramos Flores, han ido encaminadas a que sea gestor de recursos para poder realizar la obra, sin embargo, no ha habido un posicionamiento real por parte del gobierno del estado al respecto.
