Ni los reclamos, las quejas y los sellos de clausura lograron detener la puesta en marcha de la antena de telecomunicaciones.
Tras varios meses de estira y afloja entre los constructores de una antena que funcionará para la compañía Telcel y vecinos de la agencia municipal de las Mojoneras, finalmente ganó la iniciativa privada y no hay más que hacer al respecto.
Así lo reportaron los propios colonos, quienes molestos, aseguran que ‘alguien se vendió’ en el gobierno municipal y por eso la antena, que ningún vecino aprobó porque no se les preguntó, ya funciona con normalidad.

La puerta de ingreso tiene sellos de clausura violados por los trabajadores
Incluso, se puede apreciar en las puertas del terreno donde se encuentra la antena varios sellos de clausura por supuestas irregularidades en los trabajos, mismos que, cual obra clandestina, se hacían en el sigilo que otorga la madrugada.
Pero estos sellos están violados y arrancados desde el primer día en que se colocaron.
Narran los vecinos que se han acercado a especialistas y les dicen que las antenas de telecomunicaciones generan ondas radioactivas que pueden perjudicar la salud de quienes circundan la zona.
Además, la planta eléctrica para que la antena funciones genera un calor agregado, además de ruido las 24 horas.
“Aquí hasta para poner un changarrito te piden la aprobación de todos los vecinos, yo tenía un depósito y no me dieron el permiso hasta que los convencí a todos, pero llegan estos y sin preguntar levantan la antena. Alguien se vendió en el gobierno porque no nos toman en cuenta”, dijo un vecino.
Nuevamente, como en muchos otros casos, queda en evidencia que los intereses monetarios son prioritarios para el gobierno municipal que preside Arturo Dávalos y la gente que le regaló su voto, no tiene respaldo de sus autoridades.