El occidente del país, específicamente Colima y Oaxaca, son los estados donde se registraron las víctimas mortales de este virus.
La Secretaría de Salud (Ssa) reportó las primeras dos muertes por influenza, las cuales ocurrieron en Colima y Oaxaca, ambas se asocian a la falta de vacunación y a la presencia de comorbilidades como hipertensión arterial, insuficiencia renal crónica, diabetes mellitus y tabaquismo.
Cifras de la Dirección General de Epidemiología indican que hasta el 25 de octubre se han registrado 153 casos de esta enfermedad viral.
En esta temporada invernal predomina la cepa AH3N2, con 56% de los casos, seguido del tipo AH1N1 con 37% e influenza B con 7%. Los estados con más contagios confirmados son Yucatán con 66 casos, le sigue Quintana Roo con 22 y Chiapas con 16.
Expertos en inmunología afirmaron que la vacunación es la principal medida de prevención contra complicaciones que incluyen la hospitalización y la muerte.
“Vivir en peligro no es normal, durante la última temporada de influenza hubo más de 180 mil casos estimados, de los cuales 93% de las personas fallecidas no estaban vacunadas”, alertó Felipe Aguilar Ituarte, pediatra e infectólogo de Sanofi Pasteur.
Resaltó que otros grupos de riesgo son las personas con obesidad, con diabetes, mayores de 60 años, mujeres embarazadas y personal de salud.
Los especialistas llamaron a los mexicanos a aplicarse la dosis para prevenir la influenza, a fin de reducir las posibilidades de terminar en el hospital por complicaciones, e incluso de perder la vida. “Hace 10 años vivimos una pandemia de influenza y es necesario que prevengamos un nuevo brote mediante la vacunación, es eso lo que hará la diferencia”, resaltó Felipe Aguilar.
