La Amazonía brasileña perdió 9.762 kilómetros cuadrados de su área vegetal entre agosto del 2018 y julio 2019, alcanzando su mayor nivel en 11 años.
La tasa de deforestación entre agosto del pasado año y julio de 2019 subió un 29.5% respecto al mismo periodo del año 2018, de acuerdo con los datos oficiales del Instituto Nacional de Pesquisas Especiales (INPE).
La Amazonía perdió nueve mil 762 kilómetros cuadrados de su área vegetal en tan solo un año, una superficie equivalente a 10 mil campos de futbol aproximadamente.
Los datos difundidos coinciden con el sistema de alertas del propio INPE, mejor conocido como Deter, mismo que ya avistaba una elevada área deforestada en la Amazonía.
Los datos de Deter llegaron a ser cuestionados públicamente el julio pasado por el mismo presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, lo que lo llevó a la destitución del presidente del INPE.
Jair Bolsonaro, consideró que los datos presentados por dicho organismo estatal eran falsos, y que la intención solo era para perjudicar la imagen de Brasil y su gobierno.
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Las actividades económicas ilegales son la principal causa del aumento de la deforestación en la Amazonía.
