Desde hoy solo se permiten los desplazamientos para comprar artículos de limpieza, medicamentos y alimentos.
Argentina se convirtió en el primer país en América Latina en aplicar el aislamiento social obligatorio a nivel nacional desde este viernes y hasta el 31 de marzo, para enfrentar la propagación del coronavirus.
Argentina lucía hoy con menos movimiento en las calles pero con largas filas en supermercados y farmacias de personas ansiosas por aprovisionarse y que en muchos casos no guardaban la distancia de seguridad.
En el país sudamericano, donde se han registrado 128 infectados -de los cuales tres fallecieron-, las fuerzas de seguridad realizaban controles en las principales estaciones de trenes y otros centros neurálgicos de para impedir el paso a los que no contaban con permisos especiales para movilizarse.
Durante la cuarentena se permitirán los desplazamientos para realizar compras de artículos de limpieza, medicamentos y alimentos. Los trabajadores exceptuados de guardar el régimen de aislamiento son los de la salud, alimentación, fuerzas de seguridad, servicios migratorios y medios de comunicación. También los funcionarios de las administraciones nacionales y municipales y los que distribuyen combustible.
El decreto que regula la cuarentena prevé detenciones y eventuales penas de prisión para quienes no la cumplan.
En tanto, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció en su cuenta de Twitter que en las próximas horas viajará en avión desde Cuba a Buenos Aires acompañada de su hija Florencia Kirchner luego de que ésta finalizara un tratamiento médico en la isla de un año.
Si bien tiene libertad para moverse, la exmandataria (2007-2015) afirmó que cumplirá con el aislamiento.
Fernández de Kirchner, quien junto a su hija está procesada por la justicia por presunta corrupción, rechazó las críticas a su último viaje al país caribeño en medio del avance del nuevo coronavirus y alabó a los médicos que trataron a su hija.
En tanto, la Prefectura Naval -la policía guardacostas de Argentina- detuvo en una terminal portuaria a un pasajero proveniente de Uruguay infectado por COVID-19 por incumplir la cuarentena obligatoria ahora general pero antes dispuesta para los casos confirmados y sospechosos. Dos mujeres que viajaban en la misma embarcación -y que se negaron a realizarse controles- también fueron puestas a disposición de las autoridades sanitarias, migratorias y judiciales, informó el Ministerio de Seguridad.