En un informe que dieron a medios de comunicación, la concesionaria del aeropuerto aseguró tener ‘excelente calificación’ por parte de los visitantes.
El Grupo Aeroportuario del Pacífico dio un informe sobre las acciones que realizan en el aeropuerto internacional de Puerto Vallarta y aseguraron que, según calificaciones de los turistas, tienen 4.5 sobre 5 que es la calificación máxima.
Según informaron, a los turistas que arriban a la ciudad se les hace un cuestionario donde califican la comodidad de las instalaciones, la facilidad de moverse al interior del aeropuerto, los accesos para personas con discapacidad y la agilidad en los trámites para quienes vienen del extranjero, entre muchas otras áreas.
También se califica la movilidad interna, la movilidad externa, la calidad de los servicios que se ofrecen al interior y exterior del aeropuerto y la seguridad del mismo.
Con todos estos apartados, resulta difícil de comprender que la calificación que asegura GAP han obtenido sea tan alta.
El aeropuerto de Puerto Vallarta, desde hace varios años, tiene un problema importante con las goteras, al grado que varios cajeros automáticos se han averiado. Cuando llueve, las cubetas y las áreas encharcadas, al interior de las instalaciones, son el escenario que aprecian los visitantes.
También hay un grave problema con el Instituto Nacional de Migración y con el área de aduanas. A lo largo de los últimos 2 años, por lo menos 4 personas se han quejado por la cantidad de tiempo que pierden en estos escritorios por la falta de personal y la cantidad de visitantes extranjeros que llegan, sobre todo en temporada alta.
Los tiempos de espera son de hasta 2 horas y media y es lo que viven los turistas, que ya traen varias horas de vuelo en la espalda.
Por último, la movilidad también es complicada, sobre todo al exterior del aeropuerto, donde el conflicto entre taxistas del aeropuerto, taxistas tradicionales y choferes de Uber, EcoDrive e InDrive sigue vivo.
La ‘pelea por el pasaje’ es pan de cada día en el estacionamiento del aeropuerto y genera un ambiente de incomodidad e inseguridad en el turista.
Eso sin contar los altos costos del servicio autorizado, cuya tarifa mínima es de 150 pesos, sin importar que el traslado sea de apenas unas cuantas cuadras.