Con 605 cuerpos encontrados de diciembre del 2018 a septiembre de este año, Jalisco es líder nacional con mucha diferencia.
Al horror en Jalisco por las desapariciones y las fosas clandestinas se le suma un hecho sin precedentes: los criminales amontonan los cuerpos de sus víctimas, una gran parte mutiladas, en cada vez menos fosas.
Eso explica porque Jalisco es el primer lugar nacional en cantidad de cadáveres encontrados en lo que va de este sexenio, pero no figura entre los que tienen más fosas clandestinas.
Según reportó el 7 de octubre Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Jalisco acumuló 605 cadáveres exhumados de fosas clandestinas entre el 1 de diciembre de 2018 y el 30 de septiembre de 2020, muy por encima del segundo lugar, Sinaloa, con 253 víctimas.
Las cifras federales no cuadran con las estatales, pues el Gobierno de Jalisco contabiliza en ese mismo periodo 669 víctimas exhumadas, de las cuales 377 fueron extraídas de 18 fosas durante este año.
Para dimensionar el problema, en todo 2018 Jalisco reportó 121 cadáveres extraídos de 25 predios. Para 2019 se disparó la cantidad de cuerpos a 285, pero no creció tanto la cifra de fosas, pues quedó en 33.
Entre el 1 de enero del 2018 y el 31 de agosto de 2020 se reportaron 4 mil 974 personas desaparecidas que siguen pendientes de localizar. Sólo en el 1.1 por ciento de los casos la Fiscalía consiguió detener a sospechosos y que éstos fueran vinculados a proceso por un juez.
