Luego de que se diera a conocer el corte anual, donde los alcaldes y el gobernador presumieron cifras a la baja, especialistas pidieron cautela y autocrítica.

En su corte anual de seguridad, el Gobernador Enrique Alfaro y los Alcaldes metropolitanos presumieron una baja en denuncias durante el 2020; un especialista estimó que falta autocrítica.

Al igual que en su corte para todo el Estado, las autoridades informaron decrecimientos en los ocho tipos de robo a los que la Administración da seguimiento especial, que pasaron de 58 mil 328, en 2018, a 34 mil 354 denuncias, una reducción 41.1 por ciento.

También hablaron de una baja en los homicidios dolosos, pues en 2018 hubo mil 814, y en 2020 mil 514 víctimas, aunque las estadísticas presentadas hacen referencia a víctimas “directas”, una categoría distinta a la que ofrece el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad.

“Lo primero (que deberían hacer los gobiernos) es la aceptación del grave problema y la gran crisis de inseguridad que vive el Estado, dos, que las autoridades no maquillen las cifras y den a conocer los números reales, externando de manera real al pueblo de Jalisco cuáles son los números.

“Urgen cambios en el gabinete de seguridad, las autoridades que están al frente de las corporaciones totalmente se vieron rebasados en cuanto a capacidad, en cuanto a personal, sus estrategias fueron totalmente inoperantes”, afirmó el abogado penalista, Jorge Huerta Partida.

Estimó que es comprensible que entre la gente haya incredulidad y enojo ante el discurso oficial de que Jalisco va bien en materia de seguridad.

Reiteró que las cifras presentadas dejan de lado los problemas para denunciar que hay durante la pandemia, y llamó a tomar medidas, como hacer revisiones para decomisar armas. MURAL