El gobernador presumió una baja en todos los delitos en Jalisco; ayer, un hombre fue asaltado y asesinado cuando se resistió, porque llevaba a su hijo dormido.
Ya le habían robado dinero y celulares, pero cuando trataron de llevarse su camioneta, pisó el acelerador porque tuvo miedo de que se llevaran a su hijo, que estaba dormido atrás del vehículo y por eso fue asesinado.
En las primeras horas de hoy murió en un hospital privado un hombre que fue asaltado junto con su familia, en la Colonia Las Pintitas, de El Salto.
Durante la noche del viernes, Rafael Araiza Bracamontes, de 44 años, salió de su negocio en la Calle Ignacio Zaragoza, cerca de Clemente Orozco.
Su hijo estaba dormido así que lo subió a la parte trasera de su camioneta Nissan Kicks, modelo 2020; de copiloto iba su esposa.
No obstante, antes de que arrancara la familia, llegaron 8 sospechosos en una Voyager y rodearon su vehículo. Por las ventanas los amenazaron con pistolas y les exigieron sus pertenencias.
Les robaron celulares y 5 mil pesos.
Luego, los ladrones exigieron la camioneta, pero Rafael tuvo temor de que se la llevaran junto con el niño, por lo que piso el acelerador y retrocedió.
Fue cuando los sospechosos le dispararon y después huyeron. Su esposa lo llevó a un puesto de socorros y después a un hospital, pero murió por las heridas de bala en el brazo y el pecho.
La Fiscalía aseguró la camioneta Kicks color naranja que tenía tres impactos de bala. El menor, de quién no se precisó la edad, y su mamá no resultaron lesionados.