Padres de familia esperan que la Infejal determine cuándo comenzarán con la demolición de los salones que señalaron como inutilizables
El riesgo para los alumnos de la escuela primaria Manuel López Cotilla no termina, pues a pesar de que ya no ocupan siete de los 12 salones de la escuela, cuya estructura está en peligro del colapso, su estadía en clases aún no es del todo segura, debido a que las aulas portátiles que el Infejal instaló se están humedeciendo con las lluvias. El plafón de una de ellas se cayó, por fortuna, sin lesionar a ningún menor.
Luego de que los padres de familia de la primaria determinaron no utilizar ninguna de las 12 aulas del plantel ubicado en la colonia Versalles, el Instituto de Infraestructura Fisca Educativa de Jalisco (Infejal) instaló aulas portátiles para que parte de los 360 alumnos de esta institución recibieran clases en ellas, sin embargo, debido a las lluvias registradas en los últimos días, las estructuras han comenzado a humedecer.
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Según dieron a conocer padres de familia de la escuela, a semana pasada parte del plafón de una de las aulas colapso, por fortuna, al momento de que esto ocurrió, no se encontraban los alumnos en el aula, por lo cual no se registraron lesionados.
Debido a que las estructuras están colocadas sobre el suelo raso del patio, cuando llueve, las aulas se encharcan, ocasionando malestar entre los menores y los padres de familia que esperan a que el Infejal determine que va a pasar con la escuela y cuándo comienza la demolición y reconstrucción de las aulas.
Desde inicio del ciclo
Desde el inicio del periodo escolar, el pasado 20 de agosto, los padres de familia de esta escuela decidieron que sus hijos no ocuparían ya las aulas de esta institución que cuenta ya con más de 50 años de servicio. El motivo, el avanzado estado de descuido y deterioro que presentan las aulas, mismas que consideran un peligro para sus hijos.
Incluso, a efecto de hacer válida su determinación, los paterfamilia solicitaron la realización de un dictamen técnico que determinará el nivel de riesgo. El resultado fue estremecedor. Al menos cinco aulas y las direcciones deben ser derrumbadas de manera inmediata y el resto del plantel no es apto ya para su uso.
