El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tardó más de dos horas en su conferencia de prensa matutina y en todo ese tiempo esquivó el tema de los jóvenes asesinados en Lagos de Moreno.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tomó dos horas en su conferencia de prensa matutina y platicó sobre diversos temas, pero cuando le preguntaron sobre los jóvenes asesinados en Lagos de Moreno, decidió evadir el tema.
Todo comenzó el lunes, cuando empezaron a circular imágenes y videos de las víctimas amarradas y golpeadas, bajo el cobijo de la noche, en una especie de patio.
En la grabación, se puede percibir cómo los jóvenes son obligados a maltratarse entre ellos e incluso uno es presuntamente forzado a quitarle la vida a otro de sus compañeros.
Sin embargo, la circulación de este material no hizo que el presidente de México emitiera una declaración al respecto. Cuando le preguntaron de medios sobre el asunto, AMLO fingió no escuchar y reaccionó contando un chiste.
Poco importó la consternación ocasionada por la exposición del fallecimiento en videos o la exigencia por el esclarecimiento del caso, para AMLO fue más importante hablar sobre otros temas, como el presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE), el cual consideró excesivo.
