A más de 100 días del arranque de las obras en Valle de Banderas tal parece que no hay prisa por terminarlas, pues los trabajos en la mayoría de ellas llegaron a estar parados hasta por aproximadamente un mes, y la primera obra que arrancó Santana en su gobierno se mantiene sin avances significativos hasta el momento. La única obra finalizada que “inauguró” este gobierno en la cabecera municipal fue la de la calle Morelos que inició y prácticamente acabó la anterior administración.
Las palabras se las lleva el viento, pero las acciones permanecen; el presidente de Bahía de Banderas, Héctor Javier Santana García, ha expresado en distintas ocasiones que le hará justicia a Valle de Banderas (pueblo del que es originario y que es la cabecera municipal), sin embargo, sus actos no han sido acordes.
Héctor Santana tuvo su primer arranque de obra como alcalde en Valle, más específicamente en la calle Puebla entre las calles Juárez y Guerrero, y a más de 100 días, los HECHOS dictan que no hay avances significativos en esta vialidad.

Comparativa del antes y después de la primera obra.
El resto de las calles en Valle de Banderas que fueron intervenidas por el ayuntamiento se encuentran en estados similares, salvo las que están en las inmediaciones de la presidencia, a esas, al menos, ya les empezaron a construir las banquetas.
Otra cuestión que es de alerta sobre las obras es que algunas no tienen la lona informativa que marca la normativa, o que en su momento, realizaron acciones sin tenerla ¿No qué había cero tolerancia a no hacer las cosas bien?
Los vallejanos agradecen que se hagan acciones en el pueblo, pero también quieren que estén bien planeadas, que se terminen en tiempo y forma, que haya transparencia en lo que se invierte, y que no se abran calles solo para tomarse fotos con una bandera para después abandonarlas.
La única obra terminada que ha inaugurado Santana García como presidente de Bahía de Banderas en Valle de Banderas fue la de la calle Morelos que pasa por el panteón, un proyecto que corresponde a la anterior administración, o sea, él solo cortó el listón de algo que no hizo.
Si bien, nos estamos enfocando en la cabecera municipal, muchos otros poblados, como Bucerías y San Juan de Abajo, tienen situaciones similares: calles abiertas sin grandes avances y prácticamente desatendidas.
Hay que señalar que algunas de las obras que no han sido terminadas corresponden al gobierno anterior que encabezaron Mirtha N (por poco más de 2 años) y Lía Díaz Castro de León (6 meses aproximadamente), y que tienen irregularidades contractuales porque el síndico de ese entonces no firmó los documentos.
Pero hace un par de semanas, una situación similar quedó exhibida en este doceavo ayuntamiento, ya que la síndico declaró en una sesión de cabildo que pese a sus peticiones y oficios, no le están haciendo llegar los contratos y solo los de ocho obras tienen su firma (en el informe de los 100 días se dijo que llevaban 50 obras).
Por lo que se puede ver que hay un patrón “heredado” de iniciar proyectos sin contratos, tomarse la foto del banderazo, y después no poder avanzar ni terminarlos porque la ley no deja que se ejecuten los recursos por las anomalías contractuales.
Del dicho al hecho hay un largo camino, esperemos por el bien de Bahía de Banderas que las autoridades pronto resuelvan lo que tengan que resolver, y puedan terminar las obras que arrancaron, porque servir y construir implican más que solo decir que se hace.