Los legisladores y los partidos políticos han confirmado con sus actos y palabras que no quieren ayudar a los miles mexicanos afectados por los sismos
Por: Javier Frías. Ayudar a los miles de personas afectadas por los sismos que han azotado el territorio mexicano, específicamente en la zona sureste y centro del país, ha dado la oportunidad de redoblar esa unidad que tanto hacía falta al país, sin embargo, el Instituto Nacional Electoral (INE), los partidos políticos y diputados y senadores parecieran no querer encajar en esta sinergia.
Luego de estos dos siniestros, ha surgido en las redes sociales (principales líneas dictatoriales del quehacer y deshacer humano), un movimiento llamado #PartidosDenSuDinero, con el cual se busca que el 20% de los recursos públicos destinados para los partidos políticos durante el proceso electoral del próximo año, sean aplicado en robustecer el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) y de esa manera poder ayudar a más personas que lo han perdido prácticamente todo.
Así pues, desde el comienzo de este movimiento, los partidos políticos y los legisladores habían prácticamente enmudecido, pues el ceder estos recursos les quietaría la oportunidad de ‘hacer política’ y, por qué no, de llevarse a sus bolsillos parte de este millonario asalto nacional.
Luego de la insistencia, algunos legisladores salieron a las cámaras para decir que no era posible destinar esos recursos, pues ya estaban etiquetados para un fin: el proceso electoral del próximo año.
Si bien es cierto, no se puede desviar recursos ya etiquetados, pues esto presentaría desvío de fondos, el cual es un delito.
Nuestros representantes populares, añadieron que no en caso de destinar esos recursos, se requería la ‘titánica’ labor de hacer modificaciones a la ley y a los tiempos de campaña del próximo año. “Ya no alcanzamos”, respondieron los diputados.
Si los partidos políticos de verdad tuvieran un poco de compromiso con México, porque vergüenza ya vimos que no, a través de sus representantes de ambas cámaras podrían presentar una iniciativa de modificación a la ley electoral, de esas ‘fast track’, como las que mucho utilizan para hacer su triquiñuelas y, a través de ella, aprobar lo que sea necesario para destinar ese 20% de los 31 mil millones de pesos, es decir, algo así como 6 mil millones, los cuales sumados a los 9 mil millones del Fondem, representarían un poco más 15 mil millones que en este momento y en los próximo meses representarían el resurgimiento de pueblos enteros y el nuevo comienzo de los más de 2.3 millones de personas que se vieron afectadas por estos dos fenómenos catastróficos.